10-02-2020
La misión Solar Orbiter de la ESA se lanzó ayer con éxito desde Cabo Cañaveral en Florida (EE.UU.), con un cohete Atlas V411 suministrado por la NASA.
La misión va equipada con el escudo térmico proporcionado a Airbus Defence and Space por la joint venture entre Thales y Leonardo
Además, del escudo térmico, también el Instrumento científico, Metis, financiado por la Agencia Espacial Italiana (ASI), que igualmente lleva la misión, ha sido proporcionado por Thales Alenia Space.
La misión se acercará al sol como nunca antes, y proporcionará un avance esencial para una comprensión más profunda de la heliosfera y su impacto en la Tierra, ayudándonos a enfrentar los desafíos globales del clima espacial.
Más cerca del sol
En poco más de 2 años, tras las maniobras asistidas por la gravedad alrededor
de Venus y la Tierra, el Solar Orbiter alcanzará su órbita operativa en la
región más interna del Sistema Solar, observando el Sol desde una distancia
mínima de solo 0,28 Unidades Astronómicas (AU), es decir 28% de la distancia
promedio Tierra-Sol, y hasta 34° por encima del ecuador solar. La nave espacial
está equipada con 10 instrumentos científicos: 6 para
«teledetección», dedicados a la observación y toma de imágenes del
Sol, y 4 «in situ», para medir el entorno heliosférico alrededor de
la nave espacial. Durante sus 7 años de misión, estos sofisticados equipos
medirán el plasma del viento solar, el campo magnético, las ondas
electromagnéticas y electrostáticas y las partículas energéticas emitidas por
el Sol, y obtendrán imágenes espectaculares de las características solares con
una resolución nunca antes alcanzada, incluida la caracterización completa de
la corona solar, gracias a Metis.
El escudo térmico: para hacer frente al mayor desafío de la misión
Thales Alenia Space ha abordado, gracias a su experiencia, el mayor desafío de esta misión: la protección térmica. Debido a su proximidad al Sol, el Solar Orbiter estará expuesto a aproximadamente 13 veces más energía solar que en la órbita de la Tierra, haciendo que la temperatura de la superficie se eleve por encima de los 500°C. El escudo térmico es una barrera térmica altamente eficiente, diseñada y fabricada por Thales Alenia Space, que evitará que toda la nave espacial se dañe y se derrita y al mismo tiempo permitirá a Metis y otros sensores una visión directa del Sol. Su escudo frontal de alta temperatura pintado de negro está hecho de varias capas protectoras de titanio y aún consigue un mayor aislamiento del satélite mediante una combinación adecuada de mantas térmicas de temperatura más baja, nido de abeja con núcleo de aluminio y soporte de estrella de titanio.
Solar Orbiter podrá orientarse y mantenerse en la órbita correcta con la ayuda de los rastreadores de estrellas de Leonardo (AA-STR). Al igual que las brújulas, los dos sensores a bordo ayudan a guiar y orientar el satélite en el espacio de una manera precisa y confiable, con una masa muy baja y un bajo consumo de energía para ese tipo de instrumento.
Thales Alenia Space refuerza su papel como empresa líder en facilitar la exploración espacial, generando saltos gigantes en las capacidades y el rendimiento de equipos sofisticados, contribuyendo así a cumplir los objetivos científicos del Solar Orbiter. La compañía continúa con la tradición de sus contribuciones fundamentales a los principales programas europeos de exploración espacial, como la misión a Mercurio BepiColombo, Herschel, el observatorio espacial infrarrojo, Planck, la misión que miró hacia los albores del tiempo, y también se enfrenta a desafíos futuros con Euclid, la misión de la ESA que mapeará el Universo y nos ayudará a comprender mejor la materia oscura y la energía oscura, programada para su lanzamiento en 2022.
Metis: un coronógrafo innovador
Metis ha sido diseñado para proporcionar las primeras imágenes simultáneas de la corona solar, en luz visible y ultravioleta de banda estrecha. Estas observaciones nos permitirán diagnosticar, con una cobertura temporal y resolución espacial sin precedentes, las estructuras y la dinámica de la corona completa y sus características, desenmarañando por fin su evolución intrínseca de los efectos de la rotación solar.
Los datos obtenidos por Metis permitirán a los científicos caracterizar completamente de forma remota los dos componentes plasmáticos más importantes de la corona y el viento solar (electrones y protones) y responder a preguntas fundamentales sobre los orígenes del viento rápido y lento, las fuentes de partículas energéticas solares y la erupción y los cambios iniciales en las eyecciones de masa coronal.