07-12-2020
La lucha contra los incendios se ha convertido en una intensa preocupación para las comunidades de todas las zonas afectadas alrededor del Planeta, y la mala gestión forestal y la falta de quemas previas para evitar los masivos incendios, han hecho que los bomberos busquen nuevas formas de contener estos incendios mediante la adopción de la tecnología de los drones.
Las aeronaves no tripuladas se han convertido en una herramienta inestimable para multiplicar la fuerza de los bomberos en todas las fases de su trabajo: desde las medidas preventivas, pasando por la gestión de incidentes y las operaciones de rescate, hasta la vigilancia posterior a los eventos.
Algunos están equipados con cámaras multiespectrales para analizar la vegetación, o con tecnología LiDAR para generar mapas precisos de combustible en 3D que muestran dónde es más probable que se propaguen los incendios.
Y otros, pueden utilizarse para lanzar pequeñas bolas inflamables para provocar quemaduras controladas en zonas difíciles de atravesar.
En un incendio activo, los drones pueden utilizar cámaras de imágenes térmicas para mirar a través del humo para seguir los movimientos del fuego y salvar vidas. Y cuando el fuego se apaga, los drones pueden crear mapas ortomosaicos de alta resolución de las zonas devastadas para documentar los daños, acelerar las reclamaciones a los seguros y poner en marcha la planificación de la recuperación.
Las quemas controladas, que reducen la cantidad de «combustible» disponible para posibles futuros incendios forestales, son muy importantes de lograr antes de que comience la próxima temporada de incendios, y los drones son herramientas fantásticas para logarlo.
En EEUU donde los incendios son frecuentes y masivos, el Servicio Forestal ha dicho «La maleza de aquí no se había quemado en casi 100 años. El dron no sólo es más seguro sino más barato y funciona de manera eficiente. Al principio, estábamos indecisos, pero ahora queremos mucho más».
A medida que los incendios aumentan en tamaño y complejidad, también lo harán nuestras capacidades tecnológicas. A medida que la familiaridad aumenta, pronto veremos un futuro en el que estas herramientas aéreas se conviertan en el punto de partida de la lucha contra los incendios forestales, salvando hogares de la destrucción, ayudando a los bomberos y salvando vidas.
