El satélite Hispasat H36W-1 entra en servicio operacional

26-05-2017

Después de haber superado con éxito las exhaustivas pruebas realizadas en el espacio tras su lanzamiento el pasado mes de enero desde el Puerto Espacial Europeo de Kourou (Guayana Francesa) a bordo de un vehículo Soyuz, el satélite Hispasat H36W-1 se encuentra ya en su posición orbital definitiva en 36º Oeste y empezará a ofrecer los servicios de telecomunicaciones para los que fue diseñado en los próximos días.

Hispasat H36W-1

Este nuevo satélite tiene cobertura sobre Sudamérica y Europa, incluidas las Islas Canarias, y cuenta con 20 transpondedores en banda Ku y capacidad adicional en banda Ka.

Con una vida útil de 15 años, ofrecerá servicios de contribución de vídeo y backhaul celular, así como soluciones empresariales y de banda ancha, entre otros. El satélite ha sido construido por la empresa alemana OHB System AG y es la primera misión de la nueva plataforma SmallGEO, desarrollada por el fabricante alemán junto con la Agencia Espacial Europea e HISPASAT. Esta plataforma permite una sustancial reducción en masa del satélite gracias al uso de propulsión eléctrica durante toda su vida útil.

El H36W-1 despegó del Puerto Espacial Europeo de Kourou (Guayana Francesa) el pasado 27 de enero a bordo de un cohete Soyuz de la compañía Arianespace. Desde entonces, los subsistemas, transpondedores y antenas se han probado rigurosamente para asegurar su correcto funcionamiento en órbita.

El H36W-1 embarca una avanzada carga útil regenerativa, RedSAT, compuesta por una novedosa antena activa de haces reconfigurables que, junto con el procesador de a bordo, mejora la eficiencia y las prestaciones del satélite. La antena puede controlarse electrónicamente desde Tierra y reorientarse en cualquier momento de la vida del satélite, dotándole de flexibilidad para adaptar en órbita sus coberturas a cambios que se puedan producir en la misión después del lanzamiento.

El procesador de a bordo es un paso más en la evolución de los satélites, que puede simplificar considerablemente la arquitectura de la red al realizar en el espacio parte del procesado que habitualmente se realiza en Tierra. Podrá procesar hasta cuatro transpondedores de 36 MHz de forma simultánea, corrigiendo las posibles degradaciones de la señal y transmitiéndola sin errores, lo que se traduce en un sistema de comunicaciones más robusto y de mayor calidad que permite la recepción con antenas de pequeño diámetro.