Adiós a la RED BULL Air Race
Por: Lidia María Están Arias
Este año es el último de una competición apasionante, la Red Bull Air Race. Esta carrera ha sido única en su género no sólo por ser acrobática, sino por estar basada en velocidad, precisión y habilidad, y que además, cuenta con los mejores pilotos y con los aviones más ligeros, ágiles y rápidos que existen con motor de combustión interna. [1]
Los pilotos que han conseguido llegar a la carrera Red Bull tienen una vastísima experiencia en la propia acrobacia, y todos ellos han sido campeones en diferentes modalidades de este deporte aéreo, pero no solo eso, sino que para llegar a la clase llamada “master”, han pasado antes durante 1 o 2 años por la clase “challenger”, y no todos llegan.
En la RBAR No hay “pista” como tal, cada vez un circuito diferente y a baja altura, pasando por puertas que no se pueden tocar y sobrepasando los 370 km/hora mientras se aguantan fuerzas de hasta 11G hacen que las manos del piloto y el trabajo en equipo para diseñar una trazada que supere a la de los demás sin perder tiempo sea fundamental. El vuelo debe ser preciso y las tácticas agresivas; antes todo el mundo volaba más o menos vertical y ahora las milésimas de segundo que pueden arañar la práctica constante en simuladores y el ojo experto de un buen ingeniero es fundamental, aunque el peso del buen pilotaje sigue siendo el factor decisivo
Se puede pensar en todos los posibles escenarios, pero al final, es cuestión de intuición. A todo ello se suma la preparación mental antes y durante la carrera para ir a por todas ya que a veces no es fácil mantener la motivación al 100% durante toda la competición
El avión
El avión que se ha estado utilizando en la clase “master” es el ZIVKO EDGE 540 V2, que tiene 300 caballos y un ángulo de alabeo de 450º por segundo.
Las alas del Zivko Edge 540 nacieron en los años ochenta y estaban hechas de composite en vez de madera; la estructura del avión se desarrolló alrededor de ellas en 1993. Son unas alas muy especiales. El varias veces campeón, Mike Goulian afirma que probablemente podrían aguantar 20G sin problemas. Desde entonces han mejorado utilizando el software de análisis de fluidos FloEFD las puntas alares, el sistema de refrigeración, el coeficiente de arrastre del avión y su ligereza.
El ZIVKO EDGE 540 V2 cuenta con 3 depósitos de combustible: dos de 85 litros en cada ala y uno de 50 litros en el fuselaje. Esto proporciona mucha autonomía, permitiendo volar largas distancias en caso de tener que realizar travesías, pero para las carreras y cualquier acrobacia se usa solo el depósito del fuselaje.
La Red Bull lleva realizándose desde el 2003, y sólo queda una carrera para finalizar el campeonato y la serie. La de Chiba, Japón, los días 7 y 8 de septiembre pondrá punto y final a esta carrera aérea.
El piloto: Juan Velarde
Velarde reconoce que se debe al trabajo de su equipo: el táctico Anselmo Gámez, ex campeón de España absoluto y medallista en Europeos y Mundiales, compañero de acrobacias y de IBERIA; el mecánico Jesús Cañadilla, que dirigió el departamento técnico de la Red Bull Air Race y estuvo en el Ejército del Aire; el ingeniero aeronáutico Miguel de Frutos, responsable del desarrollo del avión y los reglajes del motor; el coordinador Pablo Bueno, responsable de la rapidísima comunicación y planificación y la psicóloga Manuela Rodríguez Marote, coach experta en alta competición.
“Nuestro equipo es sólido y está bien estructurado, tenemos patrocinadores que nos apoyan y creemos en nuestras capacidades”.
El esfuerzo de los patrocinadores es también fundamental: la multinacional española de energía REPSOL, la relojera suiza Hamilton, que tiene su origen en los famosos instrumentos de precisión americanos y la empresa española de simuladores SIMLOC, con la que el Team Velarde está trabajando ahora mismo para mejorar su software de análisis de trazados.
Juan es uno de los deportistas de élite reconocido por el Consejo Superior de Deportes de España, es medalla de plata por equipos en el Campeonato del Mundo de Acrobacia y tres medallas en el Campeonato de Europa de Acrobacia y en el Campeonato de España Aeroespacial.
Además, vuela un North American T-6 TEXAN histórico con la Fundación Infante de Orleans el primer domingo de cada mes y es comandante de un A330 en IBERIA. Ha volado planeadores y carga, ha sido instructor en Fort Worth y ahora mismo es sexto en la Red Bull Air Race 2019 con su ZIVKO EDGE 540 V2.
Veremos cómo acaba la última carrera y disfrutaremos del espectacular vuelo en Chiba. Será la última vez que veamos a los aviones y a los pilotos de la RBAR en acción.
[1] Ya existe una modalidad de carreras aéreas con aviones de motor eléctrico que se presentará en el 2020 conocida como e-Race. )