24-03-2020.-
Aena reorganiza el funcionamiento de sus 46 aeropuertos de España ante la caída del tráfico en un 82%. Las medidas más tajantes las aplicará en Madrid y Barcelona concentrando toda la operativa en la terminal 4 y en parte de la T1 respectivamente. Por otro lado, exonerará a las tiendas de parte del pago de los alquileres. Y revisará el dividendo ante la brusca caída de sus ingresos.
La reorganización del funcionamiento de la red de Aena pretende reducir los gastos ante la brusca bajada de la actividad a consecuencia del coronavirus. En Barajas, donde los aterrizajes y despegues se redujeron en un 79,7% hasta el pasado domingo, trasladará la operativa de la T2 y la T3 a la T1 primeramente, y en pocos días concentrará toda en la T4 (la Satélite quedará cerrada). En El Prat, con una caída de los vuelos del 89% se optará por las puertas A y D de la T1 -la T2 quedará inactiva-, así lo explicó ayer el ministro de Transportes, José Luis Ábalos. En el resto de ciudades, los horarios se adaptarán, pero previsiblemente muchas instalaciones no trabajarán.
Por otro lado, hoy se celebra un consejo de administración para analizar el reparto del dividendo de 1.153 millones (un 51% es para el Estado). A diferencia de las compañías aéreas, Aena tiene margen tanto para posponer como cancelar su dividendo para mantener liquidez en caja y hacer frente a la crisis del sector, ya que la decisión no se ha ratificado en la junta de accionistas, prevista para el 31 de marzo.
Además de para la propia Aena, estas decisiones tienen consecuencias para las empresas que explotan negocios en los aeropuertos y las aerolíneas.
Para las primeras y ante el cierre de sus instalaciones, el gestor aeroportuario español exonerará de buena parte del pago de sus rentas. José Luis Ábalos ha anunciado que “a los comercios que no puedan realizar su actividad habitual se les exonerará del pago de las rentas”. El principal beneficiario será World Duty Free. La medida supondrá una fuerte reducción de los ingresos previstos de Aena, que estaban cifrados en 800,8 millones en 2020 en rentas mínimas -aunque la liquidación final suele ser superior- de los contratos comerciales.
Por su parte, las aerolíneas se beneficiarán de los cambios en la tasa de estacionamiento, con un impacto estimado en siete millones al mes. En los próximos días se decidirá si se elimina por completo mientras dure la declaración de alarma. Por tanto sin vuelos, para el gestor aeroportuario también peligran las tasas de pasajeros (1.287 millones en 2019) y de aterrizaje (746 millones), entre otras.
