El gobierno Australiano confirma la compra de seis RPAs Northrop Grumman MQ-4C Triton

28-06-2018

La inversión inicial en la compra del Tritón es de 1.400 millones de dólares australianos (1.030 millones de dólares estadounidenses), que incluye 200 millones de dólares australianos para iniciar un programa de desarrollo cooperativo con la Armada de los Estados Unidos; y 364 millones de dólares australianos para importantes obras de infraestructura en dos bases de la Real Fuerza Aérea Australiana.

 Northrop Grumman MQ-4C Triton
Foto: US Navy/Chad Slattery

El costo total de la operación, incluyendo todos los costos de mantenimiento de vida, se estima en AU$6,900 millones de dólares australianos (U.S. $5,100 millones).

El primer RPA se entregará en el año 2023 y el último en el 2025. Tendrán su base en la base de la RAAF en Edimburgo, en Australia Meridional, y en Tindal, en el Territorio Septentrional, pero también es probable que sean enviados a otros aeródromos del continente, incluidas una serie de bases al norte y noroeste.

El anuncio marca un hito en el programa Air 7000 Fase 1B de la Fuerza de Defensa Australiana, que busca adquirir una plataforma de vigilancia marítima de gran altitud y de larga duración para complementar su flota de 12 aviones de patrulla marítima Boeing P-8A Poseidon.

P8 Poseidon de Boeing Foto: U.S. Navy
P8 Poseidon de Boeing Foto: U.S. Navy

El programa Triton obtuvo la aprobación en el 2014 y el Libro Blanco de Defensa de 2016 afirmó el compromiso del gobierno con la adquisición sujeta a la finalización exitosa del programa de desarrollo Triton de la Armada de Estados Unidos.

En ese momento se necesitaban siete Tritones, uno menos que los seis anunciados, y se limitaron inicialmente a 4.000 millones de dólares australianos, aunque esto no incluía los costes de mantenimiento durante toda la vida útil del RPA.

Según una declaración conjunta del Primer Ministro Turnbull, la Ministra de Defensa Marise Payne y el Ministro de Industria de Defensa Christopher Pyne, «El Tritón complementará el papel de vigilancia del avión P-8A Poseidón a través de operaciones sostenidas a gran distancia, además de ser capaz de llevar a cabo una serie de tareas de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR). Operando juntos, estos aparatos mejorarán significativamente nuestra capacidad de guerra antisubmarina y de ataque marítimo, así como nuestra capacidad de búsqueda y rescate.»