Las primeras astronaves de China y Emiratos ya giran alrededor del Planeta Rojo

Por: Juan Pons

Las sondas Tianwen-1 y Al Amal han superado una tras otra la compleja inserción en la órbita marciana

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Durante al menos tres meses y desde una órbita elíptica entre los 400 y 180.000 kilómetros, Tianwen-1 se dedicará a observar posibles zonas de descenso preseleccionadas desde Tierra (crédito: CNSA)

Las autoridades chinas y emiraties están más que satisfechas. El primer intento de sus respectivas agencias espaciales para alcanzar la órbita del Planeta Rojo se ha cumplido sin novedad.

La astronave Al Amal de Emiratos y tras ella Tianwen-1 de China se dejaron atrapar el 9 y el 10 de febrero, respectivamente, por la débil gravedad de Marte, un 62 por ciento menor que la de la Tierra. Para ello tuvieron que reorientarse y encender sus propulsores con el fin de reducir de forma progresiva su velocidad a menos de 20.000 kilómetros por hora.

La maniobra la efectuaron una vez que se encontraban a tan solo una decenas de miles de kilómetros del Planeta Rojo, tras navegar por el espacio una detrás de otra durante poco más de 200 días siguiendo trayectorias semejantes.

Aunque ahora ambas dan vueltas sobre el mismo planeta, la misión de cada una de ellas es muy diferente. Al Amal permanecerá alrededor de Marte durante dos años, tiempo en el que recopilará 1 Terabit de datos y los enviará a las estaciones de Tierra. Con la información adquirida, las instituciones académicas y científicas del mundo entero dispondrán de una completa visión de la atmósfera y la climatología marciana y podrán discernir qué pasó para que nuestro vecino planeta Rojo perdiera el agua que contenía hace millones de años.

La finalidad de la astronave china es distinta y más amplia. Busca tanto estudiar Marte desde su órbita como sobre el propio suelo, depositando un  vehículo todo terreno sobre su superficie y haciéndolo rodar para llevar a cabo investigaciones científicas.

astronaves chinas en marte
Los técnicos chinos están satisfechos de alcanzar la órbita de Marte en su primera misión. Ahora deben elegir el lugar exacto donde posicionar el pequeño vehículo todo terreno que alberga la astronave (crédito: Xinhua/Jin Liwang)

Lo primero es identificar el lugar exacto para el descenso

En una primera fase, durante al menos tres meses y desde una órbita elíptica entre los 400 y 180.000 kilómetros, Tianwen-1 se dedicará a observar en detalle las zonas de descenso identificadas con carácter previo por los científicos e ingenieros chinos. Todos los lugares se encuentran dentro de una gran llanura denominada Utopía Planitia que, al no haber sido visitada por ninguna sonda anterior, sus características se desconocen, pero se espera encontrar evidencias de hielo de agua.

Los datos enviados a tierra respecto a los lugares preseleccionados serán evaluados por un equipo multidisciplinar en Pekín para determinar el lugar más idóneo para posarse sobre la superficie marciana, la parte más crítica de la misión.

El descenso del módulo de superficie en cuyo interior se aloja un pequeño rover de 240 kilos tendrá lugar “en los meses de mayo o junio”, según la Agencia Espacial china. El orbitador se desprenderá del módulo de superficie, que se desplomará sobre Marte a gran velocidad protegido por su escudo térmico. Su ritmo de caída se reducida primero por un gran paracaídas y en su tramo final por retrocohetes, para que su impacto sobre el suelo marciano se produzca a la menor velocidad posible y el conjunto no sufra daños irreparables.

Si el posado se realiza correctamente, el rover estará en condiciones de recorrer durante 3 meses las proximidades del lugar en que ha sido depositado, mientras el orbitador permanecerá alrededor del planeta durante dos años, recibiendo la información del vehículo y transmitiéndola a los centros de recepción en Tierra.

De unas 5 toneladas, la sonda Tianwen-1 viaja con 13 instrumentos científicos para conseguir en una sola misión el estudio más completo posible sobre las características de Marte, en especial su ionosfera, clima y campo magnético, al igual que la morfología, topografía y composición de su superficie. Incluye un radar a bordo del orbitador y otro instalado en el rover, cuyas principales funciones es intentar descubrir si existe hielo de agua en el subsuelo.

Antenas españolas han seguido la inserción en órbita de Al Amal

Mucho más pequeña y ligera que la sonda china (1,35 toneladas),  la astronave Al Amal solo lleva tres instrumentos científicos a bordo, que deberán cumplir su labor hasta 2023 desde una órbita elíptica comprendida entre 22.000 y 44.000 kilómetros de altura. Su cámara multibanda llamada EXI es la encargada de captar imágenes de alta resolución en las bandas visible y ultravioleta y medir las propiedades del agua, el hielo, el polvo, los aerosoles y la cantidad de ozono en la atmósfera.

astronaves de emiratos en marte
Emiratos se ha incorporado recientemente a la exploración del espacio, quiere ser un actor protagonista y ha logrado en su primer intento alcanzar el Planeta Rojo, lo que se refleja en la alegría de sus ciudadanos (crédito: Chris Whiteoak/The National)

También aloja el espectrómetro de imágenes ultravioleta EMUS, concebido para estudiar las características y la variabilidad de la termosfera y del hidrógeno y oxígeno presente en Marte. Un tercer instrumento es un espectrómetro infrarrojo térmico interferométrico EMIRS, para obtener datos de los perfiles de temperatura, hielo, vapor de agua y polvo existentes en la atmósfera marciana

A petición de la Agencia Espacial de Emiratos, el seguimiento segundo a segundo de la trayectoria de Al Amal ‒que en español significa “Esperanza”‒ ha corrido a cargo de la Red de Espacio Profundo de la NASA, cuyos complejos de antenas se encuentran en Robledo de Chavela (Madrid), Canberra (Australia) y Goldstone (California).

En concreto, la antena parabólicas DSS-63 de 70 metros de diámetro y la DSS-55 de 34 instaladas en terrenos del Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) en Robledo de Chavela han sido las que han supervisado la crítica maniobra de inserción de Al Amal en la órbita marciana, operación final que tuvo lugar en la tarde del 9 de febrero.

La astronave emiratí despegó desde la base espacial japonesa de Tanegashima el 19 de julio pasado a bordo de un lanzador H-II. La china el 23 de julio desde la base espacial de Wenchang ‒al Sur del país‒ mediante un cohete Larga Marcha-5, el de mayor potencia del parque de lanzadores chino.

astronaves de emiratos y china en marte
La astronave Al Amal es mucho más pequeña y ligera que la sonda china (1,35 toneladas) y con los tres instrumentos científicos que lleva a bordo cumplirá su misión investigadora hasta 2023 (crédito: WAM)

Resta por llegar a Marte la sonda Mars2020de la NASA. Lo hará el día 18 e inmediatamente soltará un módulo de descenso con el rover Persevance, que incorpora la estación meteorológica española MEDA, concebida por el Centro de Astrobiología y desarrollada y fabricada por la industria nacional.

Acerca de Juan Pons

Juan Pons
Coronel del Ejército de Tierra (R), está especializado en asuntos espaciales, aeronáuticos y de defensa. Ha sido coronel director de la Escuela Militar de Ciencias de la Educación del ministerio de Defensa, Jefe de la Unidad de Repatriación de las fuerzas del Ejército de Tierra desplegadas en Mostar (Bosnia-Herzegovina) y profesor titular de Comunicación y Relaciones Internacionales de la Academia General Militar de Zaragoza.

Diplomado en Relaciones Internacionales por la Escuela Diplomática del Ministerio de Asuntos Exteriores, es miembro de la Asociación Atlántica Española, la Asociación de Periodistas de Defensa, la Asociación Española de Derecho Aeronáutico y Espacial y de la Asociación de Diplomados Españoles en Seguridad y Defensa.