26-08-2022
Ocho cazas F-35 y más de 200 militares se desplegaron por primera vez a finales de abril y principios de mayo pasado y operaron desde la base aérea de Spangdahlem (Alemania).
El despliegue que ha durado tres meses, era necesaria para relevar a los F-35 del 34º Escuadrón de Cazas de la Base Aérea de Hill, en Utah, que habían llegado a Europa en febrero en respuesta a la creciente agresión de Rusia hacia Ucrania y el flanco oriental de la OTAN.
Durante su estancia en Europa, los cazas de la ANG de Vermont han realizado más de 450 salidas, llevando a cabo misiones y entrenamientos sobre Estonia, Letonia, Lituania, Rumanía, Bulgaria y Macedonia del Norte, entre otros países, integrándose con los aliados de la OTAN como parte de misiones mejoradas de policía aérea y practicando combate aéreo.
El despliegue se produjo sólo unos meses después de que el 158º Ala de Caza fuera declarada unidad F-35 plenamente operativa.
Los cazas y los militares desplegados, empezaron a regresar a Vermont a principios de agosto, y a sus capacidades de quinta generación les sucedieron los F-22 que llegaron a Europa desde la Base Conjunta Elmendorf-Richardson, en Alaska.
Con todo, los altos mandos han calificado de éxito el primer despliegue de F-35 en el extranjero de la Guardia Nacional de Vermont..