Piden estudiar la venta de Saab JAS 39 Gripen a Ucrania

30-11-2022

Un miembro del parlamento sueco ha declarado que el país debería aceptar la venta de aviones de combate Saab JAS 39 Gripen a Ucrania.  

Saab JAS 39 Gripen
Foto: De Tuomo Salonen / SIMFinnish Aviation Museum – Wikipedia

El diputado Magnus Jacobsson expresó su posición argumentando que la venta debería tener lugar a pesar de la ley sueca que prohíbe la venta de armamento a un estado involucrado en una guerra.  

Además, llamó la atención sobre un reciente comentario del ministro de Defensa ucraniano, Oleksii Reznikov, quien dijo que es optimista de que el país esté en camino de recibir aviones de combate de fabricación occidental, como el F-16, el F-16 o el Gripen.  

Un tema controvertido  

La entrega de aviones de combate a Ucrania ha sido durante mucho tiempo una cuestión controvertida. Con su flota de cazas y aviones de ataque de fabricación soviética sufriendo constantes pérdidas en su resistencia a la invasión rusa, Ucrania ha reclamado en múltiples ocasiones el suministro de aviones modernos.  

Mientras tanto, incluso el suministro de viejos cazas MiG-29, utilizados por algunos países de la OTAN como Polonia y Bulgaria, fue rechazado con el argumento de que supondría un riesgo de mayor escalada del conflicto.

Hay algunas pruebas de que Ucrania ha conseguido reactivar algunos de sus viejos aviones gracias al suministro de piezas de repuesto de los países de la OTAN. Sin embargo, la entrega de aviones de combate reales, aunque se ha propuesto en más de una ocasión, no se ha materializado.  

La opción más barata

El JAS 39 Gripen, un caza polivalente monomotor fabricado por la sueca Saab, ha sido propuesto como una de las mejores opciones para Ucrania tanto por observadores ucranianos como occidentales.   

Desarrollado en la década de 1980, el Gripen fue diseñado para operar desde zonas austeras con la menor infraestructura posible.  

Además, varios informes han demostrado que el Gripen tiene un coste operativo significativamente menor en comparación con otros aviones occidentales, como el F-16, el F-18 y el Rafale.  

El avión es también comparativamente barato. Un Gripen C cuesta entre 35 y 40 millones de dólares, casi la mitad del precio de sus competidores, aunque el precio real del sistema podría ser mayor y estar casi a la par con el Rafale y el F-18.  

La última variante, el Gripen E, es significativamente más cara, aunque tanto Reznikov como Jacobsson probablemente tenían en mente los Gripen C y D, ambas variantes más antiguas actualmente operadas por Suecia, Chequia, Hungría y varios otros países.