20-05-2020
El impacto de la pandemia del COVID-19 obliga a Air France a la retirada definitiva de su flota de A380 dos años antes de su retirada oficial.
El CEO del Grupo Air France-KLM, Benjamin Smith, se ha pronunciado al respecto diciendo «El actual entorno competitivo limita los mercados en los que el A380 puede operar de forma rentable. Mantener este avión en la flota implicaría costes significativos, mientras que el programa de aviones fue suspendido por Airbus a principios de 2019.»
Se suponía que la flota iba a ser retirada en el año 2022, pero ya en noviembre del pasado año 2019, el primer aparato fue devuelto a su arrendador.
La jubilación anticipada de los A380 y su depreciación en las cuentas de Air France-KLM tendrá un impacto financiero de 500 millones de euros.
El Airbus A380 será reemplazado por aviones de nueva generación, incluyendo el Airbus A350 y otros modelos como Boeing 787, que aún no han sido entregados.
La decisión tomada de la retirada del Airbus A380, también debería ayudar a Air France a alcanzar sus objetivos de carbono que condicionan los 7.000 millones de euros de ayuda estatal que debe recibir de Francia. La compañía se comprometió a reducir en un 50% sus emisiones de CO2 por pasajero y por kilómetro entre 2005 y 2030.
